¿ Ciudadanos o súbditos ?
Cada día siento más pena por la poca relevancia que en España (y en la mayoría de los países del Sur de Europa) tiene la sociedad civil. Esto hace que los ciudadanos estemos indefensos frente a las decisiones de políticos que, en muchas ocasiones, son arbitrarias, caprichosas o, como vemos que está ocurriendo, propiciadas por la corrupción que les invade.
Así contemplamos con gran cabreo, pero sin hacer nada, las subidas intolerables de impuestos, especialmente los municipales (en mi ciudad natal, el IBI se incrementó el 32% en el último recibo), la utilización de dinero público para fines partidistas (el Ayuntamiento de Leganés va a pagar, con el dinero de sus vecinos, el mitin que Evo Morales dio en “la Cubierta”) o la admisión de importantes regalos en dinero o en especie por parte de los políticos (Gürtel).
Como oí, recientemente, en una entrevista a Manolo Pizarro, el pueblo español lo aguanta todo….salvo, que le toquen a Cristiano Ronaldo, a Messi, a Agüero o al correspondiente ídolo futbolístico local.
De hecho, las dos únicas manifestaciones no politizadas que se han producido en España durante los últimos 25 años, fueron las de Vigo y Sevilla en 1995, para impedir el descenso administrativo de los dos clubes a 2ª B…y consiguieron su objetivo, pues fueron readmitidos en Primera.
En los países anglosajones, la sociedad civil ha creado muchas instituciones capaces de defender a los ciudadanos frente al poder político. En España, la mayor parte de ellas nacen politizadas o las politizan.
Veamos algunos ejemplos:
- ONGs: Viven de las subvenciones de los políticos
- Sindicatos: Más politizados que nunca. Dicen que Cándido Méndez es el Vicepresidente Económico de Zapatero. Reciben millonarias subvenciones.
- Fundaciones: FAES, “instituto Caldera”, etc. están al servicio de los partidos políticos
Del resto, como asociaciones de barrios o pequeños pueblos, no existe prácticamente nada independiente… ¡Si hasta el presidente de un club como el Barcelona está politizado!
Solamente la blogosfera mantiene su defensa de las personas, pero, desgraciadamente, también, en España, está bastante politizada y dominada por la izquierda.
Así que, poca defensa tenemos frente a una mayoría de la clase política instalada en el “vivir de puta madre” sin importarle para nada el bienestar de sus ciudadanos… ¿o súbditos? que necesitamos que alguien nos lleve de la mano.
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