Políticas activas de empleo y...de amistad
Los "Intermediarios", ese grupo de amigos, antiguos colegiales del Colegio Mayor Mendel, que da título a este blog que, hace ya casi año y medio, empecé a escribir, hemos decidido colaborar con el Gobierno y hemos adoptado lo que se llaman políticas activas de empleo.
Para información de Corbacho, Méndez y otros analfabetos similares, esas políticas activas son las que crean puestos de trabajo, sean eventuales, temporales o indefinidos, y no las que consisten en mantener más de 3 millones de funcionarios con un montón de “liberados” sindicales que no trabajan nunca…bueno, no van a su lugar de trabajo, porque los que no trabajan son una gran parte del resto de los funcionarios.
Lo que pasa es que nuestra capacidad de creación de empleo duradero es limitada…, pero lo vamos a intentar. Y, para ello, vamos a juntarnos de nuevo en nuestra reunión anual de Intermediarios, dentro de cuatro días….concretamente, el sábado.
Y la vamos a celebrar sólo ¡¡9!! meses después de la última…No hemos esperado al año porque vemos preocupados que la noche madrileña nos necesita: los restaurantes vacíos, los “tomacopas” desérticos,… Así que el sábado, consumiremos a tope, siguiendo las instrucciones del ministro Sebastián (lo siento Miguel, pero muchos prefieren Beefeater o JB a Larios o DYC), cogeremos muchos taxis y las farmacias se llenarán en estos días previos de intermediarios comprando todos los remedios típicos para el antes, el durante y el después: Omeprazol, Benadon, etc.
Aparte de esta generación de riqueza que provocaremos, y ya “fuera de coñas”, la “Junta General de Intermediarios” es un momento entrañable del año pues es la explicitación de una gran amistad que permanece oculta, pero presente, durante todas nuestras vidas...Y esta cena es, también, una "política activa de amistad" que la mantine y refuerza...
Además, de la “gran juerga”, donde no faltarán las canciones tradicionales (Polka Frutera, Soi de Verdiciu, etc.), lo que más nos une es ese sentimiento de enorme amistad que James Taylor (uno de los cantantes más tristes que nunca ha existido) reflejó como nadie en su canción You’ve got a Friend:
Sólo con llamarme
sabes que donde quiera que esté
vendré corriendo para estar contigo,
para las fiestas y las tristezas
allí estaré
¡Tienes un amigo!
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